La red de Bibliotecas del Ayuntamiento de Oviedo, ha decidido apostar por la lectura en su aspecto más terapéutico a través de la Biblioterapia.
La coordinadora de la Red de Bibliotecas ovetense Chelo Veiga, ha presentado este proyecto a la ciudadanía con la colaboración del colectivo sanitario, representado en la figura de Olga Rico, médica del Servicio de Urgencias, que explicó a los asistentes las bondades de un fármaco tan cultural como el libro.
La biblioterapia en palabras de la facultativa, es un remedio que ya se remonta a la época de los griegos, pero ha sido en el siglo XX, en los países nórdicos, en los que podemos encontrar referencias y prácticas significativas.
Según Rico, la biblioterapia se puede desarrollar desde dos vertientes, una enfocada hacia la ayuda a la persona y otra dirigida a fomentar la creatividad, a través de la lectura de novelas. Se encuentra igualmente, avalado por estudios científicos que demuestran el beneficio de esta práctica.

Citando un estudio científico, prolongado durante 50 años, sobre una población de 3500 personas se demostró que los individuos amantes de la lectura viven una media de 2 años más frente a los que no leen.
Enumeramos a continuación, algunos de los beneficios señalados por la doctora:
-Mejora de la calidad de vida en las personas, pues se incrementan las conexiones neuronales.Ralentizando el deterioro cognitivo.
–Reducción del estrés, como explicó Rico, las pulsaciones cardíacas se reducen a partir de 8/10 minutos de lectura. Se segregan las hormonas de la felicidad, las endorfinas.
–Desarrollo de la empatía, a través de las vivencias de los personajes.
–Mejor toma de decisiones y de autonomía en el individuo. La lectura contribuye a conocer otras realidades, que nos otorgan más libertad.
Igualmente, la lectura fortalece determinadas áreas del cerebro, como el hipocampo y se estimulan otras como la amígdala, área emocional. Además se establecen un mayor número de conexiones neuronales.
La ponente, recalcó igualmente la reserva inicial que presenta la lectura, pues es una actividad que implica un esfuerzo inicial que muchas personas no consiguen vencer.
Un apunte interesante que proporcionó Olga Rico, es la clasificación que hace de los libros, según los beneficios que proporciona. De esta manera, hay libros Ventana y libros Espejo.
Los libros Ventana aprendemos a conocer otras realidades, en los libros Espejo, nos vemos reflejados en la historia que cuentan, ambos son muy enriquecedores.
Una vez, que se instala como hábito, los libros son fuente de placer, un placer que cura, distrae y acompaña en situaciones difíciles como enfermedades, fallecimiento de seres queridos y otras crisis vitales.
La red de bibliotecas del ayuntamiento, desarrollará este programa en los próximos meses, en colaboración con los Servicios Sociales y profesionales de la salud. Pondrán el foco en las personas mayores que viven situaciones de mayor soledad y de deterioro cognitivo.
En nuestro país ya hay varios modelos de biblioterapia, como los que encontramos en el ayuntamiento cántabro de Cabezón de la Sal y la red de Bibliotecas Públicas de Galicia, con el proyecto “Biblioterapia.Lecturas Saludables”.
Esperemos que se vayan incorporando varias redes de bibliotecas del mapa nacional.